La cabeza de los bebés es muy moldeable. Ya desde el momento del nacimiento, el cráneo del niño sufre una distorsión significativa en el canal del parto que suele remitir en las primeras semanas. Sin embargo, el cráneo del bebé puede deformarse localmente por fuerzas moldeadoras externas aplicadas pre o postnatalmente.
Seguro que habéis oído hablar de la plagiocefalia (plagio =oblicuo, kephale =cabeza). Se trata de un aplanamiento posterolateral de uno de los lados de la cabeza. De entre los factores favorecedores a la aparición de esta deformidad podemos encontrar:
- Un ambiente restrictivo del útero. Es decir, están tan aprisionados y su cabeza es tan moldeable que puede aplanarse por uno de sus lados.
- Que tenga una tortícolis muscular congénita. Es decir, que lateralice la cabeza porque un músculo tira más de ella que el contralateral y por consiguiente la cabeza tiende a estar más en una posición que en otra.
- La prematuridad hace que los huesos del bebé sean más débiles y por tanto menos resistentes a fuerzas moldeadoras externas.
- La posición supina durante el sueño. Como en los primeros meses el bebé no tiene fuerza en el cuello, se ejerce más presión en la parte posterior de la cabeza si permanece muchas horas en esa posición. No obstante, aún así se recomienda que los bebés duerman boca arriba para evitar el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL).
Una vez que sabemos los factores precipitantes, ¿cómo podemos prevenirlo? Y si ya la tiene, ¿de qué manera mejorarla?
Os explico dos ejercicios que resultarán muy útiles. Estando el bebé boca arriba, colocáis la mano sobre la zona superior del tórax y con la otra hacéis estos dos ejercicios:
Se recomienda en cada cambio de pañal, al menos 3-4 veces al día, y repitiendo cada ejercicio 3 veces.
¿ Y cuándo deberéis consultar?
Siempre que tengáis dudas o veáis que tenga un aplanamiento en la cabeza. El pediatra con la exploración os dirá si se trata de una plagiocefalia postural. La evolución suele ser favorable con las medidas posturales, en ocasiones se necesitará la ayuda de un fisioterapeuta y realizar ejercicios en casa, y en ocasiones excepcionales y más graves que no revierten con las medidas habituales, se deberá mandar a neurocirugía infantil para valorar la necesidad de ortesis (casco) o cirugía. En los casos en los que no veamos la evolución esperada habrá que pensar en otras entidades como la craneosinostosis. En ella vemos que alguna de las suturas se han cerrado prematuramente y que empeora con el tiempo provocando mayor deformidad, necesitando, por tanto, un tratamiento diferente.
Así que, lo más importante es que se realicen cambios posturales desde el nacimiento, de esta manera se prevendrá casi el 100% de las malformaciones craneales posturales y, si ya se tiene la plagiocefalea, consultar con tu pediatra y seguir las recomendaciones y observar la evolución.
Un saludo!